COMÓ SE COMBATE EL BROTE DE COQUELUCHE O TOS CONVULSIVA

El coqueluche, tos ferina o convulsiva puede llegar a ser una enfermedad dramática, ya que su mortalidad en los menores de 1 año puede alcanzar hasta un 2%, a pesar de los logros de la medicina moderna.

El síntoma clave gira en torno a una tos penosa y mantenida. Los clínicos europeos del renacimiento lo reconocieron con mucho acierto,  “al relacionar el espasmo quintoso con el canto del  gallo en el amanecer,  de ahí lo de coqueluche o cri du coq”, explica el pediatra Fernando Ruiz-Esquide. Agrega que, otros, más imaginativos aún, se anticiparon en siglos a la epidemiología y supusieron que las gotitas de saliva serían contagiosas, insistiendo en martirizar a los  pacientes con una capucha o coculucha.

“El mayor riesgo a enfermar de los niños pequeñitos se debe a que con este agente la madre no trasmite inmunidad a su retoño, pudiendo encontrarse casos de coqueluche en recién nacidos o lactantes pequeños por lo demás sanos,  si están expuestos al contagio”, dice el especialista.

VACUNA EFECTIVA

En Chile se ha combatido la tos convulsiva con una vacuna que se prepara a partir de suspensiones de células enteras de la bacteria Bordetella pertussis, muertas con formol. Es el componente “P” – de pertussis – de la combinación DTP que se aplica a los 2, 4, 6, 18 meses y un refuerzo a los 4 años. 

Es una vacuna muy efectiva. Excepcionalmente puede producir reacciones indeseables, porque se ocupa el bacilo completo en su fabricación. Por esta razón también se le llama vacuna celular.  Produce una buena inmunidad durante 10 o más años, para irse perdiendo paulatinamente.

Esta característica inmunitaria hace que con los años progresivamente se vaya engrosando las filas de los expuestos a enfermarse, hasta constituir un grupo suficientemente numeroso como para dar lugar a un brote, como lo que está sucediendo en la región del Biobío.

“La medida que está preparando la autoridad sanitaria es la correcta, vacunar a los adultos del entorno cercano a los bebés.  La vacuna que se piensa administrar es una dopa -con minúscula- para enfatizar que es trata de un componente pertussis acelular, a fin de minimizar los efectos secundarios”, finaliza el doctor Ruiz-Esquide.

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